Universidad de Ibagué - Tolima
Facultad de Ingeniería  - Sistemas

Gustavo Martínez Villalobos 

Inicio | Biografía | Cursos | Para pensar... | Para reflexionar... | Para reir | Enlaces

 

               

Para pensar...

Vivir o sobrevivir...

Un dicho popular reza " La vida dura tres dias y dos ya han pasado". El tiempo pasa tan deprisa a nuestro alrededor que tan sólo nos damos
oportunidad de "sobrevivir", somos esclavos de la rutina y pasamos cada uno de nuestros dias sumergidos en un mar de problemas y de situaciones
triviales que pocos momentos libres nos dejan.

Nos acostumbramos... a  vivir en nuestra casa y a no tener otra vista que no sean las ventanas de alrededor. Y como estamos acostumbrados a no tener vista, luego nos acostumbramos a no mirar para afuera. Y como no miramos para afuera luego nos acostumbramos a no abrir del todo las cortinas. Y porque no abrimos completamente las cortinas luego nos acostumbramos a encender más temprano la luz.
Y a medida que nos acostumbramos, olvidamos el Sol, olvidamos el aire, olvidamos la amplitud. Nos acostumbramos...
a despertar sobresaltados porque se nos hizo tarde,
a tomar café corriendo porque estamos atrasados. A comer un sandwich porque no da tiempo para comer a gusto.
A salir del trabajo porque ya es la noche.
A cenar rápido y dormir con el estómago pesado sin haber vivido el día.
Nos acostumbramos... a esperar el día entero y oír en el teléfono: "hoy no puedo ir". A sonreír para las personas sin recibir una sonrisa de vuelta.
A ser ignorados cuando precisábamos tanto ser vistos. Si el trabajo está duro, nos consolamos pensando en el fin de semana. Y peor aún, hacemos pesado nuestro trabajo, y a los demás, viviendo en las críticas destructivas y en la siembra de la discordia hablando negatividad y todavía sin argumento alguno.
Y si el fin de semana no hay mucho qué hacer vamos a dormir temprano y nos acostumbramos a quedar satisfechos porque siempre tenemos sueño atrasado.
Nos acostumbramos a ahorrar vida que, de poco a poquito, igual se gasta y que una vez gastada, por estar acostumbrados... nos perdimos de vivir.


He dedicado algunos instantes a recordar cuándo fue la última vez que estando en alguna reunión o simplemente charlando con alguien, haya
escuchado algún comentario que dijera algo tan simple, como, "ayer ví un hermoso atardecer", o bien, " ví a un grupo de aves volar hacia el
sur ", y aún no puedo recordarlo; piénselo bien y estoy seguro de que estará de acuerdo conmigo en que éste tipo de comentarios ya no se
escuchan fácilmente.

Alguno pensará en estos momentos que esos son comentarios superficiales
y de gente que no tiene nada sobre qué hablar, que mucho mejor sería discutir de temas de actualidad como los son las crisis económicas en el mundo o la falta de valores que vive la sociedad; si bien es cierto
que estos son temas de interés para todos ya que los vivimos 24 horas al dia, todos los dias, también es cierto que en el mundo existen muchas cosas más que valen la pena apreciar pero que por decisión propia o de la misma sociedad nos hemos abstraído de ellas.

Vivimos en un mundo en el cual es más importante saber a cuánto cerró la bolsa hoy que cómo amaneció nuestra madre, o bien, enterarnos sobre todos los detalles de 'protagonistas de novela'  a preguntar qué tal estará ese amigo que tengo tiempo sin ver.

Con esto quiero decir que hemos puesto a las personas en un segundo plano, que nos hemos vuelto frívolos y egoístas, que sólo nos importa lo que está en "nuestro" mundo y cualquier situación, persona o cosa que no pertenezca a él, no nos importa.

Nos hemos olvidado de que somos las personas las que movemos al mundo y no al revés, hemos olvidado el VIVIR para pasar tan sólo a sobrevivir en un mundo regido por el caos y la complejidad. Cuantificamos nuestro tiempo en dinero, no nos importa pasar algunas horas extras en nuestro trabajo para ganar una mejor posición en la empresa y sentir que así podemos ganar el mundo, pero nunca nos percatamos que al hacer eso
estamos perdiendo cosas tan grandes como: la infancia de nuestros hijos, la oportunidad de disfrutar a nuestros padres o de visitar algún amigo. Lo más irónico de esto es que estas cosas que alimentan y
engrandecen al ser humano son gratis y tan sólo nos cuestan un poco de nuestro tiempo.

Al escribir estas palabras me he dado cuenta de que es más valioso para mí pasar 30 minutos con mis hijos jugando fútbol, que pasar tres horas
intentando terminar ese proyecto que de cualquier forma veré mañana. Me
he dado cuenta de que me cuesta menos tomar el teléfono y hablarle a mi madre para preguntarle sobre qué tal amaneció hoy, a discutir
interminablemente con mis colegas sobre el futuro de las telecomunicaciones. Me he dado cuenta de que es más importante para mí escuchar los sueños de mis amigos, que ver las frivolidades que pasan por la televisión. Me he dado cuenta de... las cosas que hacen sentirme vivo!

Estoy convencido de que nacimos para VIVIR.

Mira a tu alrededor y ante tanta grandeza, responde: ¿Piensas seguir sobreviviendo?

Para reflexionar...

Soy profesor

Un regalo a través del tiempo

David

Vivir o sobrevivir...

Me pregunto...

¿Cuánto vales?

Mantenimiento de Sistemas

 El ruido de la carroza

La esperanza de un sueño

La hormiga productiva

Ingeniebrio

Marioneta de trapo

El amor más grande...

Se busca...

El balón

¿Quién empaca tu paracaídas?

Amor en un tarrito de leche

Vuela alto.

 

 


Inicio | Biografía | Cursos | Para pensar... | Para reflexionar... | Para reir | Enlaces

Profesor Gustavo Martínez Villalobos
Email: gmartin@nevado.cui.edu.co
Facultad de Ingeniería de Sistemas, Coruniversitaria
Ibagué, Tolima, COLOMBIA